LA SITUACIÓN SOCIAL.Tras el informe de anoche de Lanata, ahora la polémica llegó a las redes sociales.
Recién arrancaba el año y la noticia golpeó durísimo. Un nene había muerto en Chaco por desnutrición y tuberculosis. El escándalo tuvo rebote inmediato: por esos días, Jorge Capitanich aún era jefe de Gabinete de la Nación. Las durísimas críticas que recibió el funcionario tuvieron una defensa particular. Su hija Guillermina explotó en Twitter: “Mi viejo es inocente. Es la pelotuda de la mama del salame eso que no lo alimentaba”, escribió y, más sensata, a los pocos días cerró su cuenta en la red social (@gicapitanich).
Los cuestionamientos a Capitanich se deban, entre otras cosas, por los increíbles índices que difunde el Indec sobre la situación social y que marcan casi cero indigencia y poco y nada de pobreza en la provincia. Ahora, a esta polémica se sumó el clientelismo en el norte, que salió a la superficie con la elección en Tucumán.
Anoche, en su programa Periodismo para Todos, Jorge Lanata difundió un amplio informe sobre el tema. Uno de los destinatarios, claro, fue Capitanich, que un mes después de la muerte de aquel nene por desnutrición retomó su cargo como gobernador. Y ahora, sin posibilidad de reelección, se anotó para la intendencia de Resistencia.
Los cruces entre los funcionarios chaqueños y Lanata tuvieron su nuevo rebote en Twitter, donde volvió a aparecer Guillermina. Ya sin cuenta en la red, la señorita fue “escrachada” por otros usuarios en una foto en la que se la ve, abrazado a otro joven, supuestamente en El Caribe. Un escenario bien distinto al que puede verse en la provincia que gobierna su padre.
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