Barricadas, drones armados y un despliegue de 2.500 agentes transformaron las favelas de Río en un campo de batalla. La operación busca frenar al Comando Vermelho, pero deja un saldo sin precedentes de víctimas.
Una gran operación contra el narcotráfico en varias favelas de Río de Janeiro dejó este martes al menos 64 fallecidos y 81 detenidos, en lo que ya se considera la acción policial más sangrienta en la historia de la ciudad, según informaron fuentes oficiales.
El despliegue, que movilizó a unos 2.500 agentes, comenzó a primera hora en los complejos de Penha y Alemão, dos de las zonas más densamente pobladas de la capital fluminense. De acuerdo con la Policía Civil, el operativo seguía en curso al cierre de esta edición.
64 víctimas y 80 detenidos en la redada.
De las 64 víctimas mortales confirmadas hasta el momento, 60 serían civiles señalados como sospechosos y cuatro miembros de las fuerzas de seguridad.
Hasta ahora, la operación policial más letal registrada en Río databa del 6 de mayo de 2021, en la favela de Jacarezinho, donde murieron 28 personas —entre ellas un agente—, un hecho que generó fuertes denuncias de abusos policiales.
El gobernador de Río de Janeiro, Cláudio Castro, calificó la actual intervención como “la mayor operación ya realizada contra el Comando Vermelho”, una organización que, junto con el Primer Comando de la Capital (PCC), domina el crimen organizado en Brasil. Castro advirtió que el operativo sigue activo y que el balance es provisional, por lo que no se descartan más víctimas o detenciones.
É assim que a polícia do Rio de Janeiro é recebida por criminosos: com bombas lançadas por drones. Esse é o tamanho do desafio que enfrentamos. Não é mais crime comum, é narcoterrorismo. pic.twitter.com/ACZ86gLlM1
— Cláudio Castro (@claudiocastroRJ) October 28, 2025
Medios locales informaron que miembros del CV erigieron barricadas para impedir el avance policial. El enfrentamiento provocó cortes de tráfico en varias avenidas, la movilización de todos los cuerpos de seguridad de la ciudad y una parálisis temporal del transporte público, afectando a más de un centenar de líneas de autobús.
El gobernador afirmó además que los delincuentes utilizaron drones armados para atacar a los agentes en algunos puntos de las favelas, y mostró videos como prueba. Según declaró a CNN Brasil, las fuerzas del orden incautaron más de 50 fusiles de asalto y “una cantidad enorme de drogas”.
La magnitud del operativo también obligó a cerrar escuelas, suspender las actividades en la Cámara Municipal y restringir la circulación en amplias zonas de la ciudad, provocando graves trastornos en la rutina de los cariocas.
