La bacteria puede estar presente en todas las aguas y su aparición y propagación se da por los cambios en la corriente y la temperatura.
La forma de contraer esta enfermedad es al comer mariscos o al ingresar al mar con heridas abiertas.
“Se trata de una infección que puede ser grave y en algunos casos mortal, por lo que se recomienda evitar el consumo de productos del mar poco cocidos o crudos (así como su manipulación sin medidas de protección) y de igual modo, evitar el ingreso al mar con heridas o cortes en la piel”, indica el texto del ministerio de Salud Pública de Uruguay.