En general, el costo de los celulares “inteligentes”, o smartphones, ya es superior a lo que una familia tipo gastó para pasar una semana en Mar del Plata en enero de 2020.
El 2020 empezó con más preocupación por cómo la inflación afectaría el pago de las vacaciones que por la fecha en la que se detectaría el primer caso de coronavirus en Argentina. Pero en septiembre, con más de cinco meses de aislamiento social por la pandemia y cero posibilidad de subirse a un vuelo comercial para hacer turismo – y shopping- afuera del país, algunos de los gastos de enero parecen mesurados al lado de los precios que adquirieron ciertos productos no esenciales, como pueden ser los celulares.