A partir de enero del año que viene subirán los montos máximos de facturación, al igual que los pagos mensuales que realizan los contribuyentes.
A partir de enero del año 2019, se producirá un aumento en la facturación tope y los aportes para ser monotributista.
Se estima que los montos máximos de facturación, al igual que los pagos mensuales que realizan los contribuyentes, se incrementarán cerca de un 28,4%.
Para la prestación de servicio, la cifra de ingreso tope para ingresar al monotributo sería de aproximadamente $1.150.500, mientras que en lo que refiere a la actividad de comercio, la facturación máxima ascenderá a unos 1.725.800 pesos.
Según confirmaron fuentes de AFIP al diario La Nación, estas cifras son aproximadas dado que el nivel de actualización es equivalente a la recomposición que acumularán este año los jubilados y pensionados de la ANSES, que sería de un 7,7%.
Una reforma legal que se implementó este 2018 establece que las variables que integran el esquema del régimen impositivo simplificado deben actualizarse en el mes de enero, siguiendo el índice de movilidad.
Están incluidos los montos límites de facturación para ingresar al monotributo y para mantenerse en esa condición, como así también el de cada una de las categorías.
Hoy, el componente impositivo de la categoría más baja es de $87,04, y pasará a ser cercano a los $112. Para permanecer en la categoría A, el monto máximo de facturación anual aumentará de $107.525 hasta un poco más de los $138.000.
En cuanto al aporte para el sistema jubilatorio, en el escalón más bajo del esquema será de unos $493, incrementándose un 10% a medida que se avanza en el cuadro de categorías. En la categoría K, que sólo es válida para la actividad comercial, será de $996,04 este año y en enero llegará a $1279.