Ocurrió en Mar del Plata. La joven de 30 años ya había estado en recuperación pero volvió a caer. “Si no la interno se va a morir”, dijo.
Una mujer recurrió a lo último que pudo para mantener a su hija con vida. Es que la joven de 30 años es adicta y es por eso que decidió atarla a la cama para que no siga consumiendo.